Si bien se cree que los loros son aves sumamente inteligentes (algunos estiman que su inteligencia es comparable a la de un niño de 2-3 años), se considera que en realidad no entienden el significado de las palabras que repiten a pesar de lo cual pueden llegar a asociarlas con cosas y conceptos. Los loros son aves bastante sociales, las cuales realizan complicadas llamadas que tienen una función social en el ámbito de sus bandadas.
Estas llamadas pueden incluir señales de alarma o de reconocimiento de otros individuos, lo que ha sido considerado por los estudiosos del comportamiento animal como un rasgo distintivo de una especie de inteligencia. Como aspecto curioso cabe destacar que a pesar de su capacidad de imitación, en su ambiente natural los loros no acostumbran a imitar los sonidos emitidos por otras especies de su entorno. Simplemente se dedican a emitir los sonidos que necesitan para comunicarse con otros individuos de su especie.
Entonces la pregunta que muchos se hacen es si los loros no imitan a otros animales, ¿Por qué imitan a los seres humanos? Probablemente la admirable capacidad de imitación de los loros sea un indicativo de su inteligencia y la repetición constante de palabras podría ser el equivalente del balbuceo de un animal social que está tratando de integrarse al grupo al que desea pertenecer que en el caso de los loros domésticos es su familia humana.
