En este momento estás viendo El acuario para los peces

El acuario para los peces

  • Autor de la entrada:
  • Categoría de la entrada:Peces
  • Comentarios de la entrada:Sin comentarios
acuario para peces
Uno de los aspectos más importantes a tomar en cuenta a la hora de comprar un acuario para nuestros peces es el tamaño. Lo recomendable es comprarlo lo más grande posible. Así mismo, los acuarios de forma rectangular son mucho mejores que los que tienen diseños de forma redondeada o más irregular, ya que solo se ocupan del tema estético y se olvidan de lo que es mejor para el pez.
Los acuarios de mayor tamaño ofrecen las siguientes ventajas:
  • Tienen un efecto decorativo de mayor impacto.
  • Es más sencillo mantener la calidad del agua. Gracias a esto requieren de menos mantenimiento.
  • Es posible albergar más peces en un acuario grande.
  • La temperatura del agua se mantiene más constante. Si se produce un corto de suministro eléctrico, la pecera no se enfría con tanta rapidez. Por lo tanto, los gastos de calefacción son menores en proporción a los que presenta un acuario pequeño.
  • Gracias al mayor espacio interior, la persona puede colocar decoración más atractiva. Además, es más sencillo camuflar aparatos como el filtro interno, por ejemplo.
Por lo general, los acuarios más costosos tienen una mayor duración debido a que están construidos con vidrios de mayor calidad en comparación con los acuarios más baratos. Para los aficionados que están comenzando a adquirir peces, usualmente es suficiente comprar un acuario que tenga una capacidad de 60 a 120 litros. Por supuesto que hay otros más grandes. Sin embargo, la persona tiene que tomar en cuenta que el agua tiene un peso elevado y por lo tanto es necesario que consiga un soporte que sea capaz de aguantar el peso del acuario lleno de agua.
Para este fin, primero debe calcular tanto el volumen como el peso del acuario que piensa adquirir empleando las siguientes fórmulas (pecera rectangular):
Volumen = Largo x ancho x alto
Puede utilizar como convención sencilla 1 decímetro = 1 litro.
Por lo tanto, supongamos que nuestro acuario mide 100 cm x 60 cm x 60cm. Esto significa que el volumen es el siguiente:
Volumen = 10 dm x 6 dm x 6 dm = 360 litros.
Dado que la densidad del agua es 1, y un litro es equivalente a 1 kilogramo de agua, el agua contenida en el acuario tendrá un peso de 360 kilogramos y a esto hay que sumar el peso del acuario en sí, las rocas, los aparatos, etc., lo que puede dar como resultado un peso bastante significativo al final. Este peso es  el que se debe tomar en cuenta a la hora de seleccionar el soporte más adecuado.

¿Que población de peces puedo tener en mi acuario?

En realidad la población de peces que se puede tener en un acuario varía dependiendo de una serie de factores, entre los que podemos destacar los siguientes:
  • Grado de limpieza del agua: Entre más limpia esté el agua, más oxígeno contiene para los peces.
  • Temperatura del agua: El nivel de oxígeno también se ve afectado por la temperatura del agua. Entre mayor la temperatura, menor el nivel de oxigenación.
  • Tamaño de los peces: Lógicamente, entre más grandes sean los peces, mayor es su consumo de oxígeno.
  •  Actividad de los peces: Los peces más activos consumen más oxígeno que los peces poco activos, lo que puede influir en el nivel de oxígeno en el acuario si tiene muchos peces.
  • Composición química del agua: La composición química del agua puede afectar positiva o negativamente la cantidad de oxígeno que puede disolver así como la frecuencia de respiración del pez.
  • Superficie de contacto de la superficie del agua con el aire: El oxígeno del aire se disuelve por superficie de contacto en el agua, por lo tanto, entre mayor sea esta superficie, mayor el nivel de oxígeno en el acuario.
  • Cantidad de plantas: Las plantas consumen oxígeno durante las noches, aunque no tienen mayor efecto ya que en el día producen este elemento reponiendo lo consumido.

A nivel general, podemos decir que la profundidad del acuario no tiene mayor efecto. No obstante, una acuario profundo ofrece más espacio para los peces y puede afectar la cantidad de luz que llega a los niveles inferiores. En acuarios especialmente altos y sin aparatos que hagan circular el agua, puede llegar a ocurrir estratificación de temperaturas, es decir temperaturas distintas a diferentes profundidades.

Los expertos han establecido un principio práctico que puede aplicarse con éxito en la mayor parte de los casos. Un acuario normal y que tenga un mantenimiento adecuado, puede poblarse con peces a razón de 2.5 cm de pez (sin contar la cola) por cada 4 litros de agua, es decir 2.5 cm de pez por 80 cm2 de superficie.

De esta manera, en el acuario del ejemplo anterior que tiene una superficie de 6000 cm2, podríamos colocar alrededor de 187.5 cm de peces. Si tomamos la longitud promedio de los guppys (4 cm), esto quiere decir que en este acuario podríamos tener una población de 46 peces de este tipo. Claro está, estamos hablando de peces adultos. Si ponemos peces jóvenes podemos tener una mayor población pero cuando crezcan se corre el riesgo de tener un exceso de peces para el tamaño del acuario.

Debe tomarse en cuenta que esta regla se aplica cuando el acuario no cuenta con materiales técnico auxiliar y que se mantiene un equilibrio en que solo se realizan cambios parciales del agua. En términos prácticos, es posible incrementar la población de peces si se aumenta el nivel de oxígenos en el agua y se eliminan los desechos. Esto puede lograrse por medio de filtración y aireación adecuada del agua, sin embargo hay que tener en mente que si estos aparatos dejan de funcionar por cualquier motivo, las condiciones en el acuario pueden deteriorarse con rapidez y poner en peligro a los peces.

Debido a esto, los aficionados a los peces inteligentes nunca toman el riesgo de superpoblar demasiado sus acuarios solo por tener a su disposición aparatos que les permiten hacer esto. Como en todo, lo mejor es alcanzar un término medio, es decir, poblar el acuario con algunos peces extra, pero sin llegar a extremos en que se pueden producir situaciones de elevado estrés e incluso ataques entre los peces.

No debemos poner en riesgo a los peces únicamente por una cuestión estética.


 

Deja una respuesta